Iniciativa Empresarial
Por Jaime Rozas , 21 de octubre de 2020Proyecto Pincoy lanza manual de buenas prácticas para la industria salmonera
El documento de 96 páginas trae más de un centenar de recomendaciones para mejorar la salud de peces y el desempeño productivo, con el objetivo último de reducir el consumo de antibióticos.
Desde el tamaño de la ova y el sistema de incubación, pasando por el transporte de smolts y el control de la gestión de la alimentación, hasta el monitoreo de la escamación y la presencia de algas nocivas. En total, son 114 recomendaciones las que trae el Manual de Buenas Prácticas para la industria salmonera, elaborado por el Proyecto Pincoy y presentado este martes en un seminario virtual organizado por los autores de la iniciativa.
El documento, de 96 páginas, es el resultado de cuatro años de trabajo colaborativo por parte de las siete empresas que integran el proyecto —Aquagen-Bluegenomics, Blumar, Camanchaca, Cermaq, Pharmaq, Skretting y Virbac-Centrovet—, unidas por un gran objetivo: reducir el uso de antibióticos en la industria mediante la mejora de la salud animal y del desempeño productivo.
La presentación estuvo a cargo de Ronald Barlow, gerente general de Skretting Chile, y Pedro Pablo Laporte, gerente de la división Salmones de Blumar. También participaron Dag Sletmo, vicepresidente senior del banco noruego DNB —quien habló de las principales tendencias en la industria salmonera global—, y Wenche Grønbrekk, jefa de Sustentabilidad y Riesgos de Cermaq Group y asesora senior del Pacto Mundial de Naciones Unidas, quien expuso sobre la importancia de la colaboración para resolver los desafíos de la industria.
Manual de buenas prácticas
Según el último reporte de Sernapesca, en 2019 la industria registró un Índice de Consumo de Antimicrobianos (relación porcentual entre la cantidad utilizada de antimicrobiano y las toneladas cosechadas de biomasa) de 0,034 %, la cifra más baja desde 2011 (0,032 %).
Si bien hay múltiples factores que explican la reducción, entre ellas otras iniciativas que apuntan a bajar en consumo, en Pincoy destacaron la tendencia, pues es justamente el objetivo general del proyecto y de su nueva herramienta: el manual de buenas prácticas.
Barlow se refirió al documento como un “hito”: “Esta es una propuesta que surge desde el interior de Pincoy. En ningún caso pretende ser la única solución. Es simplemente poner más elementos en la mesa, junto con todas las otras iniciativas que surgen desde la autoridad y de la propia industria”, explicó el gerente general Skretting Chile, empresa impulsora de la iniciativa en 2016.
El documento cuenta con cuatro grandes capítulos: tanto los ciclos de agua dulce y agua mar, como también la salud animal y el monitoreo del bienestar animal. A través de numerosas secciones, aborda todas las etapas del proceso productivo, desde la reproducción hasta la cosecha, reuniendo y estandarizando los principales factores que influyen en la producción, más opinión técnica de profesionales.
“(El manual) analiza cada una de las etapas de producción y los factores involucrados, realizando una descripción, su fundamento teórico para poder entenderlo, y recomendaciones para un resultado óptimo. Incorpora también aspectos operacionales que están íntimamente asociados a las condiciones sanitarias de los peces”, explicó Pedro Pablo Laporte, gerente de la división Salmones de Blumar.
Su contenido está basado en las experiencias y aprendizajes obtenidos durante la primera etapa del proyecto, entre 2016 y 2018, que consideró cuatro ciclos en agua dulce y agua de mar. También colaboraron el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, y el Instituto Tecnológico del Salmón (Intesal), de SalmonChile. Y ahora que fue lanzado, será entregado a diversas empresas e instituciones. También estará disponible prontamente para ser descargado por cualquier interesado.
Próximos pasos
En todo caso el trabajo de Pincoy continúa. El proyecto se encuentra una segunda etapa, con dos centros que iniciaron su ciclo en 2019, por lo que “el siguiente hito es compartir esos resultados”, afirmó Ronald Barlow.
En todo caso, el gerente general de Skretting también miró a largo plazo: “Mi sueño personal es que, si encontramos sinergia y encontramos ciertas claves para la reducción de antibióticos, estas sean ampliamente compartidas. Así que yo diría que en la práctica viene el análisis de resultados de los ciclos productivos, y posterior a eso seguir compartiendo lo que vayamos encontrando”.
Laporte también destacó la importancia de que más empresas se colaboren en esta iniciativa para seguir disminuyendo de manera sostenida el uso de antibióticos en la industria salmonera. De esta forma, sostuvo el gerente de la división Salmones de Blumar, “en diez años tener el tema bastante resuelto, en términos de que no sea tema, en comparación con otras especies, en comparación con los otros países”.