Pescadores del Biobío manifiestan preocupación por traslado de salmones muertos a Talcahuano

Más de 450 toneladas de mortalidad, para ser transformadas en harina y aceite de pescado, arribaron este viernes al puerto de San Vicente. Sernapesca y la Superintendencia del Medio Ambiente, en tanto, informaron que no detectaron irregularidades en el procedimiento.

Más de 450 toneladas de salmones muertos para ser transformadas en harina y aceite de pescado, han sido trasladadas hasta ahora vía marítima y terrestre desde la Región Los Lagos hacia la región del Biobío, producto de la masiva mortandad de peces causada por floraciones algales nocivas (FAN) registradas desde fines de marzo en las regiones de Los Lagos y Aysén, las que han afectado casi una veintena de centros de cultivo y que a este viernes acumula más de 4500 toneladas.

Ante la emergencia, pescadores artesanales del Biobío encendieron alarmas y sostuvieron una reunión con el Sernapesca para informarse acerca del proceso de traslado de los salmones, sin embargo, dijeron estar preocupados por la situación.

“Nuestra inquietud como pescadores, pero también como ciudadanos, viene de la interrogante de por qué la región tiene que ser el basurero de una industria que se emplaza en las regiones de Los Lagos y Aysén y que ha demostrado ser altamente contaminante”, afirmó este sábado en un comunicado César Jorquera, presidente de la Asociación Gremial de Pescadores Artesanales de San Vicente (Región del Biobío) y director de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales de Chile (Conapach).

“Manifestamos al Sernapesca nuestra preocupación e instamos a la autoridad a que sea un proceso transparente”, afirmó el dirigente de la pesca artesanal.

Descarga de mortalidad en Talcahuano

La tarde de este viernes la Superintendencia del Medio Ambiente informó que realizó en Talcahuano —en conjunto con Sernapesca y la Autoridad Marítima— una serie de actividades de inspección comprendidas entre el punto de desembarco de 451 toneladas de salmones muertos de la empresa Mowi, procedentes de Aysén —transportados por el PAM CORAL 1ero, embarcación de propiedad de pesquera Landes— hasta las instalaciones de la misma empresa en el sector de la isla Rocuant.

“Los peces arribaron en buenas condiciones sanitarias, siendo procesados en una de las líneas de harina de pescado de la empresa”, informó la SMA, “sin riesgo para el medio ambiente o la salud de la población, tanto así que no fue posible percibir olor al procesamiento de salmón en el perímetro de la planta”.

En tanto, Sernapesca detalló este viernes que abordaron el barco para revisar las seis bodegas y hacer control de emisiones, no detectando irregularidad. “Posteriormente, se inició la descarga que duró aproximadamente ocho horas, donde se percibió materia prima en muy buen estado, la que se trasladó a la planta de reducción de la empresa Landes para elaboración de harina y aceite de pescado”, explicó.

Al margen de lo informado por las entidades fiscalizadoras, Jorquera reiteró la aprehensión del sector ante el traslado de la mortalidad.

“Apuntamos además a que la logística que ocupa la industria salmonera es ineficiente, ya que no entendemos por qué la reducción del desecho no se realiza en la región en la que se origina”, puntualizó el dirigente, “teniendo que trasladarse muchos kilómetros hasta nuestras costas, con todo el peligro y las molestias que ello implica para pescadores y ciudadanos”.

De todas formas, Jorquera dijo que por ahora desestimaron presentar una acción judicial para detener el proceso, ya que revestía un peligro mayor el retener la embarcación portadora del desecho en las costas, pero que exigen a las autoridades regionales que se cumpla la normativa y se busque una nueva logística para futuras emergencias. 

“Como región hemos luchado mucho tiempo para negar la instalación de salmoneras en nuestras costas por lo que no entendemos por qué tenemos que recibir residuos de la misma industria y desde otras regiones, en plena temporada de la sardina y la anchoveta”, sostuvo.

Más recursos para investigación

Por otro lado, José Alvarado, presidente de la Federación de Pescadores Artesanales de Hualaihué (Región de Los Lagos) y director de la Conapach, sostuvo que aunque la floración algal se produjo en un fiordo cercano, no reviste un mayor peligro para la actividad pesquera y mitilicultora, sin embargo, pidió a la autoridad destinar recursos para realizar estudios donde se analice la naturaleza de estos eventos y sus consecuencias, a la vez que determinar si están relacionados con el cambio climático”. 

“Chile debe enfrentar y estudiar científicamente los fenómenos que revisten peligro de contaminación en los mares chilenos” afirmó el dirigente, “y adoptar nuevas tecnologías en la industria salmonera, que ya están siendo utilizadas en el extranjero y que contribuyen a evitar desastres medioambientales a raíz de la mortandad de peces producidas por las floraciones”.