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Por Jaime Rozas , 16 de marzo de 2021Sernapesca manifiesta preocupación por considerable aumento de extracción ilegal de algas en Tarapacá
Desde el 1 de enero a la fecha, se han incautado en la región 5300 kilos de algas extraídas ilegalmente, más del doble de lo que se decomisó durante todo el año 2020.
Desde el 1 de enero a la fecha, se han incautado en la región de Tarapacá 5300 kilos de algas extraídas ilegalmente, más del doble de lo que se decomisó durante todo el año 2020, correspondiente a 2484 kilos.
Así dio cuenta esta jornada el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), tras un balance sobre los resultados de fiscalización desarrollados en la zona durante este verano.
La considerable alza ha generado inquietud en la autoridad pesquera, ya que muestra “un preocupante aumento” en el volumen de extracción ilegal de algas pardas, así como en la cantidad incautada por el organismo fiscalizador.
“Hemos tenido muchas más incautaciones de alga seca en la playa. Tenemos un incremento en el número de agentes barreteando, que no está inscrita como alguero recolector en el Registro Pesquero Artesanal”, afirmó Marcelo Moreno, director regional de Sernapesca Tarapacá.
La autoridad también explicó que ha sido complejo dar con los responsables, porque al advertir la presencia de los fiscalizadores, se dan a la fuga o se desentienden del alga acopiada en la playa, por lo que no se les puede imputar la infracción.
“Desde enero a la fecha estamos saliendo dos veces por semana, hacia distintos puntos de extracción que se definen en base a un análisis de riesgo, además de las denuncias que ingresan, pero es muy difícil dar con los responsables”, manifestó Moreno.
La autoridad fiscalizadora agregó que gran parte de estos hallazgos se produce en la zona sur de la región, “donde además tenemos la presencia de un número importante de migrantes irregulares que se dedican a esta actividad y que está dañando severamente la sustentabilidad de este recurso, que es sustento de muchas familias que están debidamente inscritas y que hacen una explotación responsable”.
Asimismo, en su balance el director regional de Sernapesca destacó el trabajo conjunto que se desarrolla de manera permanente con la Autoridad Marítima, que habitualmente los acompaña en los operativos en playa.
En 2019, el desembarque artesanal de algas pardas —huiro, huiro negro y huiro palo— en la región llegó a 22 083 toneladas, siendo el huiro negro la especie con mayor volumen de extracción: 20 865 toneladas.
La extracción ilegal de macroalgas ha causado preocupación en distintos organismos durante este último tiempo, debido a la técnica de barreteo para su extracción, la cual implica golpear y dañar el fondo marino.
En noviembre pasado, la organización Oceana y científicos denunciaron la situación. En enero, en tanto, el Instituto de Fomento Pesquero anunció la implementación de una red de monitoreo en la macrozona norte para diseñar e implementar un sistema de monitoreo de algas pardas.
Plantas procesadoras
Por otra parte, Moreno relevó los buenos resultados de un programa de trabajo implementado el año pasado y que incrementó el control a las plantas procesadoras de algas.
“Estamos con un programa de vigilancia muy estrecha de las plantas picadoras y que procesan algas, con controles de bodegas y de stock. Actualmente, tenemos cerca de diez plantas trabajando en la zona, e iniciaremos un proceso de actualización de este registro y procederemos a caducar los permisos plantas que no hayan declarado operación en los últimos cuatro años”, concluyó la autoridad.